Tu bebé está ya ocupando casi todo el espacio en el útero. Está del tamaño de una coliflor, pesa casi un kilo y mide alrededor de 36,5 centímetros, desde su cabecita hasta los talones. Ahora abre y cierra los ojitos, se chupa el dedo, y tiene ya su horario regular de dormir y estar despierto. Sus pulmones todavía no están totalmente desarrollados, pero si naciera antes de tiempo, podría respirar con ayuda. Y si súbitamente sientes unos saltitos rítmicos... ¡seguramente es que tiene hipo! A partir de ahora será bastante común que notes cuando esto ocurre. El hipo no suele durar mucho y además, a él o a ella no le molesta, así que disfruta las cosquillitas que te hace. Por otro lado, el bebé está ahora mCada vez que acuda a la cita prenatal, el profesional le tomará la presión arterial para ver si está alta y constatará si hay proteína en la orina. Con esos análisis podrá ver si hay señales de preeclampsia, que también se conoce como toxemia o hipertensión inducida por el embarazo. Esa afección se manifiesta en 1 de cada 20 embarazos. Es más probable que suceda en los primeros embarazos y después de la semana 20. Para muchas mujeres, si el médico controla las señales de preeclampsia, el embarazo continuará normalmente. En casos graves, la preeclampsia puede ser mortal para la madre y el bebé. La única “cura” es el nacimiento del bebé. ás activo porque su cerebro está cada vez más desarrollado .Si pudieras verlo ahora descubrirías el color de sus ojos ya que el iris está pigmentado.Su piel está comenzando a engrosarse y en la próxima semana se depositarán en ella células córneas que le darán el aspecto de nuestra piel.
TU CUERPO
Tu cuerpo se está preparando ahora para la recta final, y puede que estés empezando a notar nuevos síntomas, como dolores de espalda. Alrededor de la mitad de las mujeres embarazadas padecen algún tipo de dolor de espalda. El dolor en la parte baja de la espalda es bastante común, pero más frecuente aún es el dolor en la parte posterior de la pelvis. Es un dolor que se siente muy adentro de las nalgas, en uno de los lados de la espalda, o en ambos, y algunas veces acompañado también de dolor en la parte de atrás de los muslos. El dolor puede aparecer a consecuencia de actividades como caminar, subir escaleras, levantarse o sentarse en una silla baja, girarse y levantar algo que pesa. Las posiciones en las que las caderas están dobladas, como cuando estás sentada en una silla y te inclinas hacia delante, pueden hacer que el dolor en la pelvis empeore.
También es posible que sientas calambres en los músculos de las piernas de vez en cuando. Esto es por todo el peso extra que tienes, y también porque el útero está haciendo que trabaje más el sistema circulatorio, así como los nervios que van desde el tronco hasta las piernas. Los calambres en las piernas son más comunes durante la noche, pero también pueden aparecer durante el día. Es posible que se acentúen a medida que el embarazo avance. Una forma de aliviarlos es estirar los músculos de las pantorrillas (la parte de atrás de las piernas, entre la rodilla y el pie). Para hacerlo, ponte de pie, con la rodilla un poco doblada y el talón apoyado en el suelo, apunta los dedos de los pies hacia adelante y flexiónalos luego hacia arriba, hacia la espinilla. Caminar durante algunos minutos o darte un masaje en la pantorrilla, a veces también ayuda.
Tu abdomen cambia de forma continuamente debido a los firmes movimientos del bebé que aún no se ha ubicado definitivamente.Si permanece mucho tiempo en una posición transversal (perpendicular al eje del cuerpo) te sentirás molesta y comenzarás a tener contracciones localizadas por la estimulación del músculo uterino.Relájate, toma baños de inmersión tibios y trata de ajustar tu abdomen con tu ropa interior para hacer que cambie de posición.
A partir de ahora los cambios hormonales pueden variar semana a semana. Es normal que tus pies se hinchen. Aún así, si la hinchazón dura mucho o si pasa a la cara, habla con tu especialista. La formación de estrías en los pechos y la barriga son muy comunes en este período de tiempo.
Al mismo tiempo, puedes sentir las llamadas contracciones Braxton Hicks. Aunque hay mujeres que no pasan por ello, estas contracciones (que reciben el nombre del primer médico en describirlas) son encogimientos del útero que empiezan a partir de la sexta semana del embarazo. Sin embargo, si las notas, será a partir de la semana 29 o la 30. Esto es normal, pero si sientes más de 5 contracciones en una hora es recomendable que hables con un médico. Podrías estar de parto antes de tiempo. Aún así, no te preocupes. Con 7 meses el feto está lo suficientemente desarrollado para que pueda nacer un niño sano, aunque necesite estar unas semanas bajo control y en la incubadora.
Ya son más de 27 semanas y unos cuantos kilos más. Notarás que estando embarazada tienes un sentido del equilibrio diferente al de tu estado habitual. Ten cuidado con las caídas.
Ya son más de 27 semanas y unos cuantos kilos más. Notarás que estando embarazada tienes un sentido del equilibrio diferente al de tu estado habitual. Ten cuidado con las caídas.
hermoso la forma como expresas lo que va pasando dentro de nosotras.
ResponderEliminarGracias