Tu bebé tiene 13 semanas de vida y comienza a crecerle pelo en todo su cuerpo. Se llama lanugo y luego desaparecerá después del nacimiento.Ya tiene pelo en la cabeza, pestañas y sus párpados están cerrados ya que están pegados.Sus desplazamientos son amplios porque son ayudados por el líquido amniótico que lo rodea y de esta forma puede ejercitar sus músculos. ¡En muy poco tiempo, comenzarás a sentirlo!.A partir de este momento, una ecografía puede establecer que todos sus órganos están perfectamente sanos y si lo deseas puedes averiguar también su sexo.Además, el dosaje en sangre de alfafetoproteína, una proteína del bebé que aumenta o disminuye sensiblemente cuando hay problemas, puede tranquilizarte respecto a que esté completamente sanito. Solamente se necesita una muestra de tu sangre para averiguarlo.
¿Qué me sucede esta semana?
Seguramente ya comienzas a sentirte radiante. Te aconsejamos que cambies tu vestimenta y que te pongas bonita.
¿Qué me sucede esta semana?
Seguramente ya comienzas a sentirte radiante. Te aconsejamos que cambies tu vestimenta y que te pongas bonita.
Las náuseas y la fatiga pueden ir desapareciendo. Además, es posible que por fin sientas algún movimiento del bebé alrededor alrededor de la semana 17 o 18. Tu barriga y tus pechos crecerán bastante a lo largo de estas semanas. De modo que si hasta ahora no has usado ropa de premamá o sujetadores más grandes, puede que empieces a necesitarlos.
Cuando usted tiene alrededor de 15 semanas de embarazo, es probable que su médico le sugiera que se practique una amniocentesis. La amniocentesis es una prueba que detecta o descarta ciertos trastornos hereditarios en el feto. También evalúa la madurez pulmonar para determinar si el feto puede soportar un parto precoz. Con esta prueba también se puede detectar el sexo del bebé.
Por lo general, los médicos sugieren la amniocentesis a las mujeres con riesgo de tener un bebé con trastornos particulares, tales como:
Tener 35 años o más al momento del parto.
Tener un familiar cercano con algún trastorno.
Haber tenido un embarazo previo o bebé afectado por algún trastorno.
Haber obtenido resultados positivos (tales como conteo alto o bajo de alfafetoproteína) que pudieran indicar una anomalía.
Los médicos también sugieren la amniocentesis a las mujeres que tengan complicaciones del embarazo, tales como incompatibilidad Rh, que requieran un parto precoz.
Por lo general, los médicos sugieren la amniocentesis a las mujeres con riesgo de tener un bebé con trastornos particulares, tales como:
Tener 35 años o más al momento del parto.
Tener un familiar cercano con algún trastorno.
Haber tenido un embarazo previo o bebé afectado por algún trastorno.
Haber obtenido resultados positivos (tales como conteo alto o bajo de alfafetoproteína) que pudieran indicar una anomalía.
Los médicos también sugieren la amniocentesis a las mujeres que tengan complicaciones del embarazo, tales como incompatibilidad Rh, que requieran un parto precoz.
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