El otro sentido de mi vida

LA POSICIÓN DURANTE EL PARTO 

La biología no ha previsto que la mujer durante su trabajo de parto permanezca acostada. Puede moverse y cambiar de posición las veces que lo necesite y quiera. Esta movilidad  de ninguna manera afecta al bienestar fetal. La inmovilidad si afecta la salud del feto.

Posición acostada : desventajas

• Dificulta la circulación pues el útero grávido descansa sobre los gruesos vasos sanguíneos abdominales provocando una disminución  de la oxigenación fetal.
• La dilatación es más lenta y está sujeta a mayores complicaciones, debido a que la presión se desvía sobre la pared posterior del útero.
• La expulsión requiere más esfuerzo, demora más y lleva a complicaciones. 
• La falta de una efectiva y sostenida presión por parte de la cabeza fetal sobre el periné no permite una eficaz y pausada distensión del mismo, con la consecuencia de una necesidad compulsiva de realizar una episiotomía que seria innecesaria.
• La salida de la placenta es más complicada y con mayor pérdida de sangre debido a que el hematoma retroplacentario y la placenta colocan su peso en la dirección equivocada; en lugar de orientarse hacia el canal vaginal dilatado, presionan contra la pared uterina posterior. 
• Hay más riesgo de contraer una infección vaginal por pérdida de orina o del contenido anal (heces o restos del enema).
• También hay consecuencias negativas para el bebé, cuyo polo encefálico corre más riesgo de hemorragia intracraneal, posibles causas a su vez de sufrimiento fetal. Esto hace necesaria una extracción rápida con fórceps, ventosa y cesáreas.
•  La mujer permanece ajena a lo que sucede, desinformada de lo que ocurre en su esfera genital, mira al techo y recibe órdenes que los especialistas le dan desde arriba; con frecuencia sufre angustia y desesperación.

Posición, de pie o en cuclillas: ventajas

• Menos probabilidades de sufrir un desgarro del perineo 
• Más posibilidades de tener una segunda fase del proceso del parto normal, sin intervención quirúrgica. 
• Aumento de un modo natural el tamaño de la abertura vaginal y favorece la salida del bebe cabeza abajo. En la posición en cuclillas, el diámetro anteroposterior de la pelvis ósea (de delante hacia atrás) aumenta medio centímetro o más.